Las montañas de Nikko tienen una majestuosidad que es objeto de culto religioso. Las tierras inexploradas de Nikko fueron descubiertas por primera vez por el monje Shodo Shonin (735-817). En aquellos tiempos la fe en la deidad Kannon estaba en auge, y Shonin concibió la cumbre del monte Nantai (2.486 m) como la Tierra Pura de Kannon y rindió veneración a los dioses que residían en la montaña. Shonin buscó llegar a la cima como modo de reforzar su propia fe, y, aunque se vio obstaculizado en su ascenso por el denso bosque virgen, al tercer intento finalmente logró llegar a la cumbre y allí construyó un pequeño santuario. Se dice que esto fue el origen del actual Okumiya (santuario trasero) del Santuario de Futarasan.

  • El monte Nantai

    Elevándose sobre la orilla norte del lago Chuzenji, con su imponente figura, el monte Nantai es la montaña más prominente de la cadena montañosa de Nikko. Los lagos, cascadas, praderas y humedales que se extienden al pie de la montaña fueron el producto de su actividad volcánica. Todos los años, el 31 de julio, se celebra la Fiesta Nantaisan Tohai Kosha y la gente comienza a ascender hacia la cumbre del monte a la medianoche del día siguiente.